No hace falta ser máster en mindfulness para deducir que a un urbanita, pasar tiempo en la naturaleza, le relaja. Los expertos defienden que disminuye los niveles de estrés, ansiedad, insomnio y estado depresivo.
En este sentido, se ve un crecimiento del gusto por el senderismo, la marcha nórdica y las caminatas por espacios verdes.
Es más, desde hace tiempo se habla de una práctica terapéutica originaria de Japón que comenzó a prescribirse en los años 80 y que busca precisamente eso: llenar el cuerpo y la mente del aire, los sonidos y los olores de la naturaleza viva.
Concretamente, los baños de bosque comienza en España a ganar adeptos. Basta teclear en Google la frase para encontrar posibles rutas por los más maravillosos bosques de nuestra geografía.
Tenerife, en Asturias, Galicia, León, Vizcaya, Madrid, Barcelona, Cádiz, Navarra, Segovia… Cada zona tiene su encanto en forma de bosque.
El Instituto DKV de la Vida realizó hace un par de años un informe en colaboración e ISGlobal en el que se hablaba de esta actividad semi-deportiva como una verdadera propuesta para el mantenimiento de la salud. De ahí obtenemos en qué consiste el baño de bosque:
“Esta práctica terapéutica originaria de Japón -donde se conoce como Shinrin-yoku- consiste en recorrer de manera relajada un ecosistema forestal y sumergirse en el entorno empleando todos los sentidos”.
Semana Santa y primavera son periodos muy propicios para practicar shinrin-yoku. Por el buen tiempo, la floración, más horas de sol, mayor energía que durante los días de mucho frío o de mucho calor.
Asímismo, en el mencionado informe “Baños de bosque, una propuesta de salud”, elaborado por el Instituto DKV de la Vida Saludable en colaboración con el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), se revela que pasar tiempo en estos espacios verdes tiene muchos beneficios:
- Disminuyen los niveles de estrés, ansiedad, insomnio y estado depresivo
- Ayudan a reducir la obesidad, la diabetes y la presión arterial, ayudando a prevenir determinadas enfermedades no transmisibles y mejorando el sistema inmunitario
7 beneficios fisiológicos y psicológicos de un baño de bosque:
- Relaja la actividad involuntaria e inconsciente de la mayoría de los órganos
- Reduce los requerimientos de oxígeno por parte del córtex cerebral
- Rebaja la frecuencia cardíaca y la tensión arterial, entre otras funciones del sistema cardiovascular
- Disminuye las hormonas del estrés, así como la adiponectina o los niveles de glucosa, las cuales tienen una relación directa con patologías como la obesidad o la diabetes tipo 2
- Fortalece el sistema inmunitario
- Mejora el estado de ánimo positivo, la vitalidad y el bienestar psicológico
- Rebaja la tensión psicológica, el estrés, la ansiedad, el insomnio, la depresión, la ira o la fatiga, entre otros aspectos relacionados con la salud emocional
En Japón se promueven los baños de bosque como práctica terapéutica dentro de sus políticas de medicina preventiva. Allí lo practican casi dos millones de personas.
En España, que fue el primer país europeo en implantarlo en 2007, ya se han establecido varias rutas especializadas en diferentes puntos. Búscalas en Google y… respira.