Ya sabemos que el dermaroller es uno de los dispositivos anti-edad que mejor funcionan. Su objetivo es crear micro heridas en la piel que estimulan el proceso natural de curación de la misma y, de este modo, la regeneración de las células epiteliales por una mayor producción de colágeno, lo que ayuda a eliminar ciertas imperfecciones cutáneas como marcas de acné, arruguitas o estrías recientes.
Además, estos micro-orificios que crea favorecen la mayor penetración de activos como el ácido hialurónico o la vitamina C.
Eso sí, de su correcto uso y de la compra adecuada depende el éxito del tratamiento.
Para empezar, hay que tener claro qué vamos a comprar. Las características que debe tener un dermaroller para ser fiable son: poseer certificado CE, que sus materiales sean hipoalergénicos y esterilizables, con una longitud máxima por aguja de un milímetro y en una densidad de más de 500 agujas por rodillo.
Así que, una vez que te hayas respondido a la pregunta: ¿Pasarías agujas por tu cara para conseguir una piel mejor?, aprende cómo se usa correctamente un dermaroller:
- El dermaroller debe estar siempre impoluto, es lo más importante para evitar infecciones. Después de cada uso es obligatorio desinfectarlo con un spray especial que no deje residuo y tenga base alcohol o clorhexidina. Si no, se pulveriza con alcohol médico y, posteriormente, se aclara con agua hervida templada.
- Antes de pasarlo, la piel debe estar muy limpia y seca.
- Al principio, conviene aplicar una mínima presión para dejar que tu piel se vaya acostumbrando. Además, la piel podría resentirse si ejerces demasiada presión.
Tras su uso, se nota un ligero enrojecimiento y la sensación de haberte quemado un poquito, sin que sea doloroso. Si enrojece demasiado, descansa durante un par de días. - En cuanto al número de pasadas, lo idóneo es que el tiempo total de uso en todo el rostro no sobrepase los 3-4 minutos. Se recomienda moverlo en línea recta arriba y abajo en horizontal, vertical y las dos diagonales pasando 3-4 veces en cada sentido de movimiento.
- Una buena pauta es pasarlo 5 días sí, 5 días no porque con esto se logra que la piel tenga el suficiente estrés para regenerarse de forma eficiente sin causar trauma.
No se debe usar el rodillo sobre zonas con herida ni sobre granos. - Justo después de terminar las pasadas con el rodillo, se aplica el suero con ácidos (hialurónico, ascórbico, retinoico) o ampolla de belleza.
“Los 5 días de reposo son básicos para que la piel se recupere. De no hacerlo, la piel podría comenzar a endurecerse como mecanismo de defensa” (Carmen Navarro).
