Ante el acné post vacacional, ¡no te escondas! • Guapísimas

“Cuando llegue el verano, con el sol, se te quitarán los granos”. Si eres de los que lidia con el acné, seguramente habrás escuchado esto muchas veces.

Hayas hecho caso o no, tenemos que aclararte que, sin ser una mentira, es una verdad a medias.

En pequeñas dosis, el sol parece mejorar el acné y, además, el bronceado camufla los granitos y las marcas. Sofía Ruiz del Cueto, co-directora de la Clínica de Medicina Estética Mira+Cueto, lo aclara:

“En ciertos casos, el acné mejora con una moderada exposición al sol durante en verano. Sin embargo, cuando cesa la exposición, es decir, durante el otoño, esa mejoría suele venir seguida por un rebrote o agravamiento del problema.

Es entonces cuando conviene acudir sin demora a la consulta del dermatólogo o médico estético e iniciar un tratamiento adecuado”.

La exposición continuada al sol, que en España puede durar hasta tres meses en su forma más intensa, termina por secar la piel y puede contribuir a la obstrucción de los poros, lo que hará que salgan más granos.

Comencemos por el comienzo.

Cuando las personas que sufren de acné ven mejorada esta afección de la piel durante las primeras puestas al sol, deben saber que esto es casi un “espejismo”. Esta reducción de los granos en la piel se debe a las propiedades antinflamatorias, secantes y antibacterianas del sol, que reduce el exceso de grasa.

Además, el bronceado esconde temporalmente las imperfecciones. “Sin embargo, cuando cesa la exposición a los rayos UVA puede ser que aparezca incluso más acné del que se tenía antes.

Esto se debe a que en los folículos de la piel se acumulan grasas y el espesor de la capa cutánea es mayor por el sudor y la humedad”, aclara la Dra. Constanza Bahillo, del Departamento de Dermatología de Face Clinic.

Digamos que es un efecto rebote en toda regla. Así lo explica el Dr. Leo Cerrud, experto en Medicina Estética: “Cuando volvemos de vacaciones, tras haber tomado el sol, llega la reacción inflamatoria y producción de sebo extra para compensar la sequedad, y esto empeora el brote acneico”.

Limpieza a tope

La Dra. Bahillo recomienda tomar el sol con precaución y moderación durante un tiempo no muy prolongado. Así evitaremos problemas de acné y otros derivados de la exposición solar, como pueden ser la aparición de manchas o melanomas.

Además, a la vuelta de vacaciones, si te encuentras problemas de granitos, debes emplearte a fondo. Ella propone volver a la rutina de cuidados para tener la piel saludable, sin olvidarse la protección solar diaria (en este caso, siempre oil free o sin aceites) ni saltarse una limpieza adecuada al menos dos veces al día.

Además, nos regala algunos consejos:

  1. Desoír la creencia popular que asegura que las cremas hidratantes provocan más granos y utilizar una hidratante adecuada que evite la sequedad excesiva de la piel provocada por el sol
  2. Exfoliar pero suavemente para evitar sensibilización e inflamación
  3. Llevar una dieta equilibrada rica en frutas y verduras y no consumir muchas grasas saturadas
  4. Utilizar maquillaje oil free o libre de aceites
  5. No tocar los granos para evitar cicatrices e inflamaciones