Cómo cuidar el pelo en verano... • Guapísimas

El verano supone una dura prueba para el cabello y en tu mano está que llegue a septiembre en las mejores condiciones posibles. Existen unas claves para que tu pelo sobreviva al verano y están en posesión de los expertos.

Para salir a nuestro rescate, Eduardo Sánchez, director de Maison Eduardo Sánchez* nos regala las suyas. Síguelas y evitarás el desastre capilar. Cuando vuelvas de vacaciones, irás a la pelu por placer, no por necesidad. Suena bien, ¿verdad? Toma nota de ellas:

1. Protección de doble escudo

Implica el uso de protectores solares que salvaguarden el cabello del sol y otras agresiones, pero también de gorras, sombreros o pañuelos que supongan un escudo físico a tantos y tan continuos enemigos. Estos enemigos, en verano, son muchos y variados. Cada agente externo afecta al cabello de una determinada manera:

Por un lado, la radiación UV altera los pigmentos de color del pelo, reseca mucho y fragiliza la queratina, además de robar a las melenas todo su brillo.

Por otro, está el viento, que enreda el cabello, lo ensucia más y provoca que, al desenredarlo, la fibra sufra y se vaya debilitando.

La arena irrita mucho el cuero cabelludo y provoca sensibilidad.

El cloro modifica el color y seca el pelo atacando a las grasas naturales protectoras del cabello.

La sal marina, por su parte, cristaliza sobre la fibra capilar y abre las puntas.

El calor también inflama e irrita el cuero cabelludo y resta nutrición.

2. En húmedo, ¡ojo con el peine!

Justo después del baño, el cabello es especialmente frágil. Por eso, antes de desenredarlo, es necesario aplicar un acondicionador sin aclarado o el mismo protector solar capilar, para ayudar al desenredado mientras se nutre el cabello. Hay que hacerlo siempre con un peine de púas anchas y evitando tirones que puedan romper la fibra. Recuerda que hay todo un protocolo del desenredado perfecto.

3. Lávate más el pelo

Olvida todas esas recomendaciones (más bien mitos) de que lavar el cabello a diario es malo. Tanto si lo has sumergido en el agua del mar como en el de la piscina, es imprescindible lavar bien el pelo para eliminar restos de salitre o de cloro. ¿El mejor aliado? Un champú purificante pero suave y de uso frecuente y acompañarlo siempre de un acondicionador, con o sin aclarado o de un aceite o sérum, según los gustos.

4. Ponte mucha mascarilla con el pelo seco

Mínimo dos veces por semana hay que aplicar una mascarilla capilar que repare e hidrate en profundidad el cabello. Esto, que podría parecer lo mismo que haces siempre, supone un gran diferencia cuando lo haces en seco. No importa tanto el tiempo de exposición –bastaría con 10-15 minutos-, como hacerlo en seco antes de lavar el cabello, porque el agua impide que el producto penetre en la fibra capilar y sirve de menos. Después de aplicar la mascarilla, lavar el cabello de forma habitual.

5. Si vas teñida, extra de mimos

Los cabellos teñidos o con mechas sufren especialmente en verano: son más porosos y, por lo tanto, más sensibles a las agresiones externas. Los rubios claros se oxidan mucho y los rojos son los más sensibles a la pérdida de tono. Por eso, el uso de champú, acondicionador o mascarilla, así como de aceites y sérums se hace imprescindible.

6. En verano, rubias menos rubias

Es recomendable que en la última visita al peluquero antes de ir a la playa o a recibir mucho sol, se apueste por un rubio algo más oscuro. La exposición solar, el cloro y el salitre ya aclaran de por si el cabello. Este consejo deben leerlo con especial atención las que lleven rubios dorados y miel, que son los que más aclaran y tornan hacia tonos indeseados. Los rubios beige y platino sobreviven mejor porque el verano los potencia.

7. ¿Qué tal un poco de pigmentos extra?

Los champús, acondicionadores o mascarillas con pigmentos ahora, sí o sí, serán tus aliados imprescindibles si tienes el cabello coloreado o con mechas. Utilizados siguiendo los consejos de cada fabricante, su acción es fundamental para mantener la intensidad del color y el brillo a salvo de las continuas agresiones que el verano supone para tu cabello y para neutralizar los tonos indeseados.

8. Jura fidelidad a tu peluquero

Dí no a ir a un salón de belleza diferente durante las vacaciones. Es frecuente el desastre de color cuando buscas una peluquería para un retoque de emergencia en tu destino de veraneo. Si es imprescindible, pide a tu estilista de confianza la fórmula que utiliza en sus trabajos de color y llévala contigo a la peluquería que vayas. Así el margen de error disminuirá.

*El salon Maison Eduardo Sánchez está en las calles Claudio Coello 57 y Marceliano Santamaría de Madrid.