Parece increíble, pero las españolas todavía nos quemamos cada verano • Guapísimas

Más de la mitad de las españolas (el 59%) confiesa quemarse con el sol al menos una vez cada verano. Creemos que la concienciación sobre el peligro de no protegerse adecuadamente del sol es algo hecho, pero no es así.

Los datos de una encuesta realizada por Birchbox lo confirman: una de cada dos españolas todavía se quema en verano. Cada verano.

Te puede parecer increíble, pero más increíble aún es seguir viendo imágenes de influencers como Chiara Ferragni (34 añitos y 24 millones de personas siguiéndola en Instagram) que, haciendo caso omiso del consejo experto, sigue acabando los primeros días de verano como un cangrejo (y encima hace chascarrillos):

Pero volvamos a las españolas. Por si la amenaza de cáncer de piel no fuera suficiente motivo, tampoco nos impresionan las consecuencias del fotoenvejecimiento. Un pobretón 54% de las encuestadas afirma que usa protección solar facial diariamente y 5 de cada 10 confiesan que suelen tener reacciones en la piel cuando se exponen al sol y afirman que suelen notarse más manchas al finalizar el verano (51%). Son conscientes, pero pasan.

Pero volvamos a las quemaduras. Si eres de las que cuando llega a la playa, se deja llevar por el ansia de bronceado, descuidando el peligro de quemarse y se pasa dos noches sin dormir, sigue leyendo:

Prevenir la quemadura

“Una quemadura, sobre todo en los niños y adolescentes, tiene un riesgo importante de convertirse en el futuro en cáncer de piel”, afirma la farmacéutica y experta en dermofarmacia Rocío Escalante.

Para empezar, sepamos que una quemadura no es una herida, es una reacción de la piel ante una exposición solar excesiva (cuando la piel no ha sido debidamente protegida o se ha sobrepasado el tiempo de exposición al sol y la melanina, que es el pigmento natural de nuestra piel que nos protege del daño solar, ya no puede hacer nada).

Quemaduras graves o leves

Si te has quemado, lo primero que notarás es que la piel se te ha enrojecido y tienes una molesta sensación de calor. Muchas veces, es lo ideal, la cosa no pasa de ahí. Ten la precaución de ponerte al sol al día siguiente y trata de reparar mucho la zona con aftersun.

Ahora bien, si la quemadura es importante, tras el enrojecimiento de la piel, llegarán las ampollas, luego las costras y, finalmente, la descamación. Así lo afirma Escalante, que añade que, a estos síntomas, se pueden sumar otros como fiebre, náuseas, vómitos y dolores de cabeza.

Qué hacer si te has quemado con el sol (consejos de Rocío Escalante):

  1. Que te vea un médico, sobre todo si te han salido ampollas, para determinar el alcance del daño. NO te toques las ampollas.
  2. Si es solo enrojecimiento, hidrata mucho con aftersun (suelen llevar activos calmantes como el aloe vera y la centella asiática)
  3. Conviene también enfriar la zona, pero no debemos aplicar hielo directamente. Se puede mojar con agua fría.
  4. Hasta que se pase el malestar, usa ropa holgada y cómoda, que no te roce la zona dañada.

Una vez más, el mejor consejo es la prevención.

“Es importante realizar una exposición progresiva y aplicar SPF 50 en todo el rostro y cuerpo, sin olvidar las zonas en las que nadie piensa. Aunque estés paseando o en el agua, también te puedes quemar, así que hay que utilizar protección solar siempre. También si está nublado porque parte de los rayos atraviesan las nubes. Debajo de la sombrilla también te puedes quemar, ya que en general estos tejidos dejan pasar un porcentaje de los rayos” (Rocío Escalante, farmacéutica)