Ayer se estrenó “NOSE: el trabajo más secreto del mundo”, un docu-film que describe dos años siguiendo a François Demachy, famoso nariz y perfumista de Dior.
Un auténtico delirio para los sentidos que descubre los secretos tras la creación de perfumes: plantaciones, materias primas, fórmulas… Un documento increíble para los amantes de la perfumería.
Ser perfumista es una profesión absolutamente fascinante. A medio camino entre el artesano y el alquimista, el misterio de las creaciones que llegan a conseguir es algo que fascina a beauty victims de todo el mundo.
Este documental, una creación de Clément Beauvais y Arthur de Kersauson, que ya está disponible en Apple TV, Google Play, Amazon Prime, Movistar, Filmin y Rakuten, cuenta cómo, durante más de dos años, estos dos realizadores han seguido al perfumista por diversos continentes, en busca de las esencias más nobles para crear los perfumes Dior.
El viaje les lleva a Grasse, Nosy Be, la isla de Célebes o las costas de Irlanda.
Todo un mundo de aromas y de belleza se abre ante ellos, paisajes extraordinarios poblados de flores y materias primas de excepción, de mujeres y hombres apasionados. Con infinita paciencia, capturan el tiempo que pasa y los gestos expertos, las sonrisas y los silencios, los momentos de creación solitaria o la sinergia colectiva que suelen acompañar el nacimiento de un perfume de excepción”.
Si eres una apasionada de los perfumes y te apetece ver el documental, conocido ya como una «smell good movie», conoce primero a su protagonista:
Así es François Demachy
“No soy artista, soy un artesano”. Reservado y humilde, ni la estela de Sauvage, verdadero fenómeno mundial, ni los numerosos éxitos que han marcado su carrera han conseguido cambiar a François Demachy.
Tras una primera carrera brillante en el universo de la perfumería de lujo, se convirtió en 2006 en el Perfumista-Creador de Dior. De sus manos (y su nariz) salen todas las fragancias Dior, que crea entre su laboratorio parisino y su feudo Fontaines Parfumées, en pleno corazón de Grasse.
En esta tierra que le vio nacer, Demachy lleva 15 años estableciendo acuerdos de colaboración con nuevas generaciones de productores de flores bio, con el fin de ofrecer a las fragancias Dior las flores más preciadas y, de paso, redinamizar la agricultura local.
En Sri Lanka, en la India, en Italia o en la isla de Nosy Be, este incansable correcaminos, amante de la materia más bella, sigue sellando acuerdos de colaboración con productores locales para asegurarse de que los perfumes Dior se elaboran con los ingredientes más nobles.
