La locura de la golden milk no cesa. También conocida como tumeric latte o leche dorada, es pasto de los filtros de Instagram y tiene su origen en la filosofía ayurvédica, que le atribuye beneficios de diez en diez y a todos los niveles.
Consiste, básicamente, en una preparación caliente y dulce cuyos ingredientes básicos son leche y cúrcuma.
Si bien es cierto que existe un refrán en la India que dice “Quien toma cúrcuma cada día vive 100 años de salud”, un poco de esa especia disuelta en leche y puesta a hervir tampoco puede tener demasiados beneficios científicamente probados, más allá de ser una forma entretenida de consumir leche (o sea, calcio).
Eso y el hecho de que tomarte una bebida caliente, con buen sabor, contribuye a encontrar un momento relajado, que eso sí que beneficia la salud a nivel global, dado lo malo malísimo que es vivir estresado. Y, por supuesto, que la costumbre de tomar esa tumeric latte sustituya al gin tonic en tan loable misión de desconexión.
Una bebida deliciosa
La golden milk es tan, tan fotogénica y mola tanto el storytelling ayurvédico que tiene detrás, que las influencers se lanzaron a ella en masa y desde hace un par de años se ve y casi degusta a través de miles de pantallas. Desde Guapísimas te animamos a probarla porque lo cierto es que, no será la panacea, pero está bastante rica.
Sobre la leche ya lo sabes todo y sobre la cúrcuma podemos decirte que es una especia cuyo activo principal es la curcumina, un polifenol que presenta propiedades antioxidantes y anti-inflamatorias.
Eso sí, no menos beneficios antioxidantes de los que tienen los cítricos, las uvas, el brécol o el mismísimo perejil. Ahora bien, ¿quién quiere tomarse una repugnante infusión de hierba amarga cuando puede tomar una fotogénica y dulce mezcla de especias y leche?
Golden milk light
Hoy estamos aquí para contaros que existe una versión ligera de la golden milk o leche dorada. Cuando decimos ligera no nos referimos a hipocalórica, sino más fácilmente digerible.
Si los ingredientes principales son cúrcuma y leche de vaca entera, tampoco hay que romperse la cabeza para deducir cuál será su versión ligera. ¡Exacto! Lo que estabas pensando: todo igual, pero con leche sin lactosa.
Y hasta aquí el misterio. Ahora, paso a paso, te enseñamos (bueno, te enseñan los expertos de Kaiku sin lactosa) a hacer la receta de la Tumeric Latte.
Los beneficios de la golden milk surgen de la combinación de especias. La cúrcuma es una buena aliada contra la inflamación y sienta bien los días de ánimo bajo. Por su parte, el jengibre ayuda en infecciones de garganta, bronquitis y resfriados”, sugieren desde Kaiku.
Elaboración, paso a paso, de golden milk sin lactosa
- Para esta receta, los ingredientes esenciales son la leche semidesnatada sin lactosa y la cúrcuma (en polvo mejor que en raíz). Además, necesitas pimienta negra, cardamomo, jengibre en raíz, canela en rama o en polvo, miel y té negro (opcional).
- La materia grasa de la leche ayuda a absorber todos los nutrientes, por eso lo ideal es prepararla con leche entera o semidesnatada pero en la versión sin lactosa para mantener la ligereza.
- Coloca una olla en el fuego y vierte en ella un vaso de leche por persona. Por cada unidad, añade media cucharada pequeña de cúrcuma en polvo, un pellizco de pimienta negra molida, un par de semillas de cardamomo, un pellizco grande de canela.
- Pela un pedazo de jengibre (1/4 de raíz), córtalo en láminas y añade a la olla.
- Mezcla a fuego lento durante 10-15 minutos sin que la leche llegue a hervir.
- Puedes variar la cantidad de cada especia para potenciar más una u otra, dependiendo del gusto.
- En los últimos minutos, se puede añadir té negro a la mezcla, pero es opcional.
- Para terminar con un toque dulce, pon un poco de miel en la bebida caliente.
- Sirve en una taza de té, no más grande, puesto que este tamaño es el ideal para disfrutar de los beneficios de la golden milk.
- Un truco de Guapísimas: Si la quieres un poco menos calórica, en lugar de miel pon stevia.
