La bichectomia o extirpación de las bolsas de Bichat, una sencilla intervención que consigue un rostro más afilado
Los pómulos cincelados forman parte del nuevo canon de belleza. No hay más que abrir Instagram para comprobarlo. Ahora es relativamente fácil conseguirlo, gracias a una intervención mínimamente invasiva.
Con ella, el rostro se estiliza, mejorando su aspecto estético y toda la armonía facial”
Así opina el doctor Álvaro Sada, cirujano maxilofacial y director de la unidad maxilofacial del Instituto Profesor Sada y se refiere a la bichectomía, una intervención que busca la estilización del rostro mediante la extracción de las bolsas de grasa situadas en la mejilla inferior, justo debajo del pómulo, y conocidas como bolas de Bichat.
“Su retirada permite marcar bien el pómulo y afilar el óvalo facial, a la vez que define el tercio inferior, mediante la marcación de la línea mandibular”, argumenta la cirujana facial y experta en anatomía del rostro María Teresa Achiques, directora médica de Sensabell Plastic Surgery y miembro de la European Academy of Facial Plastic Surgery.
Algo está pasando en las consultas de los cirujanos plásticos. Aunque la bichectomía no es una intervención nueva, es más, se practica desde hace décadas, vive ahora un momento de oro.
El Dr. Sada apunta que la extracción de las bolas de Bichat –que escribimos en mayúscula porque deben su nombre al Dr. Bichat, su descubridor, un biólogo y anatomista francés que, ya en el siglo diecinueve comprobó que había dos bolsas de grasa entre los músculos masetero y buccinador- se ha impuesto al relleno de pómulos en aquellas mujeres (y también hombres) que desean deshacerse de los kilos “ópticos” del rostro.
El deseo de retirar las bolas de Bichat no tiene que ver con el sobrepeso porque su tamaño lo determina la genética. El paciente ideal es aquel con una redondez excesiva del rostro o un reborde mandibular no definido.
Lo mejor de esta cirugía es que logra los deseos de estructura ósea sin la necesidad de agregar nada externo en el óvalo facial. Esto, en la era del selfie, donde el hialurónico chorrea la pantalla mientras vas pasando Stories, es mucho decir.
Pero es cierto. Es una operación sencilla, pero muy eficaz. Las bolas, aunque por fuera no se perciben tan grandes, pueden ocupar lo que una bola de golf. ¿Te imaginas perder esa grasa en una zona tan pequeña como la cara?
“La grasa facial es un tipo de grasa rebelde, por mucho que hagamos dieta o ejercicio sigue estando ahí. Cuando extraemos grasa del tamaño de dos pelotas de golf, los resultados son más que visibles” explica el Dr. Álvaro Sada.
A través de una mini incisión dentro de la boca (un centímetro de largo), la grasa se extrae suavemente. “La sencillez de la técnica permite que el paciente recobre su vida social y laboral de forma inmediata”, añade el experto. ¿Los resultados? Se perciben definitivos pasado un mes.
Desde Clínicas Dorsia se aventuran a apostar por algunas famosas que se habrían hecho una extracción de las bolas de Bichat.
Angelina Jolie, considerada el canon de belleza femenina por excelencia, evidencia un cambio: Donde antes había un rostro redondeado, ahora lucen unos pómulos muy marcados.
Jennifer Lawrence: Cuando comenzó su carrera, uno de sus rasgos más característicos era una cara redondeada. Ahora su rostro luce más fino.
La española Elsa Pataky luce, desde hace años, un rostro más fino. Parece que, además de este tratamiento, podría haberse realizado un aumento de pómulos.
A estos nombres, desde Guapísimas podemos sumar el evidente ejemplo de Bella Hadid que, además del tan de moda tratamiento Foxy Eyes, claramente se ha hecho una bichectomía (y quizá algo más en la zona de la barbilla).
El Dr. Gio Dhzuguburia, especialista en cirugía plástica, estética y reparadora de INOUT nos tranquiliza:
Y la respuesta que casi nadie quiere contestar… ¿Cuánto cuesta? “Aproximadamente, 1350 euros”, responde el Dr. Dhzuguburia.
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