Son muchas las veces en que surge la duda de si se puede usar la mascarilla de pelo como acondicionador y viceversa. Teniendo en cuenta que, poderse, se puede, es importante saber la diferencia entre ambos productos para sacarle todo el partido posible a uno y otro.
Desde el departamento de I+D de Shampora, firma que, entre otras cosas, hace tratamiento capilar a medida, nos explican las dos diferencias principales entre acondicionador y mascarilla.
Al ser dos cosméticos con funciones y composiciones diferentes, conviene fijarse en lo superficial, para empezar.
Distinta composición química
Seguro que no se te escapa que la primera diferencia es de consistencia. Piensas en un acondicionador y te viene a la cabeza un producto ligero y, muchas veces, incluso líquido o en spray. Además, la experiencia te dice que es más fácilmente enjuagable. La mascarilla, por su parte, es consistente, mantecosa… ¿verdad?
Esta diferencia no es solo visible, también se debe a su composición. Ambos productos cambian mucho entre ellos desde el punto de vista químico.
Shampora nos explica:
El pH de un acondicionador, en general, es ligeramente ácido (4,5 aproximadamente). Esto le permite cerrar las cutículas y dejar el cabello más brillante y desenredado. La mascarilla, en su lugar, tiene una consistencia densa, menos viscosa y su pH es de alrededor de 5 – 5,5. Esto le permite abrir las cutículas y hacer penetrar al interior de la estructura del cabello, una profunda nutrición e hidratación”.
Para qué sirve el acondicionador y para qué sirve la mascarilla
Por todo esto, deducimos que, aunque a veces nos dejemos expuesto el acondicionador como si fuera mascarilla o usemos una mascarilla para desenredar, ambos productos se deben a sus propias obligaciones. Y cuanto mejor conozcas estas, más partido sacarás a ambas opciones.
El acondicionador
- Se aplica después del champú.
- Tiene como objetivo disciplinar y desenredar el pelo, dejándolo suave y con brillo.
- Lleva a cabo estas funciones interviniendo sobre la parte más externa de la superficie del cabello, protegiéndolo de agentes externos y reforzándolo.
La mascarilla
- Es rica en ingredientes ultra nutritivos como aceites y mantecas.
- Su función es la de nutrir, suavizar e hidratar a fondo, desarrollando una acción reestructurante y reparadora al interior de la estructura del cabello.
- Se puede usar después de lavar el pelo o antes, dejándola expuesta un tiempo, de forma que su efecto sea más intensivo.
Con todo esto, podríamos resumir que, dado que el acondicionador actúa sobre la superficie externa, y la mascarilla en la parte más interna del cabello, son productos complementarios, no hay que usar uno u otro.