Es uno de los tonos que más se piden últimamente en las peluquerías, ¿será el que te conviene? Averígualo
Ya nadie come chocolate con leche. El chocolate puro, con alto contenido en cacao, se ha convertido en la chuche de los que más se cuidan. Los estantes de las tabletas con 85% de cacao se vacían a diario y hay quien pretende alcanzar la inmortalidad saboreando onzas de chocolate al 99%.
Este gusto por el chocolate negro parece haberse trasladado a las peluquerías y ya hay entre los estilistas quien defiende que el tono más de moda es el “dark chocolate al 60%”.
Como el que luce la inefable Tamara Falcó. ¿Y por qué traemos a la flamante Master Chef Celebrity hasta nuestra portada? Porque nos han soplado desde la pelu más de moda de Madrid que muchas clientas ya piden el “castaño de Tamara”.
Parece que su aparición semanal en el programa El Hormiguero de Antena 3 y su (ya más que confirmado) romance con Íñigo Onieva ha puesto el foco, además de sobre sus ocurrencias, sobre su imagen. Concretamente, en su nuevo pelo.
Hace tiempo ya que metió la tijera en su melena, dando paso a un bob que es a veces long bob y que con mucha frecuencia lleva sujeto en una coleta baja y pulida con raya en el centro, al estilo Monica Bellucci.
Si has pasado ya de los 40, atenta. Este tono ha llegado para romper tabúes sobre lo que se puede llevar y lo que no a cierta edad. Porque… ¿quién dijo que, pasados los cuarenta, todas rubias? De eso, nada.
Penélope Cruz, Paz Vega y muchas otras divas nacidas a mitad de los setenta así lo demuestran y la experta colorista Diana Daureo (directora de su propio salón en Madrid) defiende que esa creencia es cosa del pasado y no funciona para todas las mujeres.
“Cuando en la tarta empiezan a acumularse 35, 36, 37 velas, la mayoría de las mujeres (casi siempre de mano de sus peluqueros), empiezan a tornar, más o menos sutilmente, hacia distintas tonalidades de rubio. Es histórico, una costumbre que se trasmite de generación en generación”, sostiene Daureo. La mayoría de peluqueros lo consideran una apuesta segura porque, como explica la estilista madrileña, con el rubio (y en esto no hay matices posibles) resulta más fácil disimular las canas que cuando hay contraste con un tono más oscuro.
“Además, con los rubios se suavizan los signos de la edad, pues los rubios aportan una luz que ayuda, no solo a disimular visualmente arruguitas, sino a hacer que los rasgos parezcan menos prominentes o marcados, como la nariz”, especifica.
Llegados a este punto, Diana nos cuenta que Tamara Falcó es uno de los nombres que más se repite como inspiración cuando una clienta quiere oscurecer un poco su tono de pelo. “Un castaño en su punto justo (al 60%) -y bien llevado- puede favorecer y rejuvenecer de igual manera (o incluso más) que cualquier rubio, pasados los 35-40”, opina la experta.
El castaño luminoso resulta elegante, fácil de llevar y aporta cierto cariz de normalidad con un twist”.
Diana Daureo te aconseja:
El dark chocolate al 60%, a pesar de ser muy oscuro (sin llegar a moreno), es el que más favorece. El castaño claro suele resultar apagado y plano. El dark de Tamara crea mayor contraste con la piel, ayuda a dar profundidad a la mirada y marca o resalta los rasgos: pómulos, labios, nariz…”
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