El Oráculo te cuenta las consecuencias de una y otra opción y te aporta soluciones para ambas
Las vacaciones de verano generalmente significan una pausa de dos o más semanas en el entrenamiento. Esto no tiene por qué ser malo, es más, hay quien dice que tiene su parte positiva.
Ahora bien, con esto del entrenamiento en vacaciones, ni calvo ni con dos pelucas. Hay formas y formas de descansar y desconectar y también formas de mantener la actividad física realizada como rutina a lo largo del año.
Sobre esto y sobre cómo hacer para seguir ejercitándose fuera del lugar de residencia nos hablan los expertos de Brooklyn Fitboxing, que también responden a las dudas: ¿cuánto tiempo descansar? y ¿cómo seguir entrenando?
Tu intención es descansar pero puede que ir de cien a cero no sea la mejor opción. “Cuando el organismo está acostumbrado a entrenar o a realizar actividad física diaria es importante no abandonar de golpe”, cuentan desde Brooklyn Fitboxing. Ahora bien, sostienen estos expertos, este efecto negativo será mayor o menor dependiendo del tiempo que se abandone. Ahí van los diferentes escenarios:
Descansar unos días puede ser bueno (si se ha entrenado de forma regular) porque en dos días el cuerpo puede aprovechar, recuperarse y reparar la musculatura. Pasada una semana sin actividad, es normal sentirse bien, pero las fibras musculares ya empiezan a debilitarse y el cuerpo comienza a retener más líquidos de lo normal. No es el peor escenario, se puede recuperar la forma física volviendo al deporte.
Tras dos semanas sin entrenar, la forma física comienza a disminuir de un modo más evidente y la resistencia cardiovascular disminuye considerablemente. Todas las actividades requerirán de un esfuerzo extra.
Un mes sin realizar deporte o actividad física se nota en la pérdida de músculo y resistencia que se había ganado en los meses anteriores de entrenamiento. Se comienza a ganar más grasa y el músculo se debilita, por lo que se queman menos calorías durante los tiempos de descanso. Es probable, además, que los niveles de estrés aumenten y la calidad del sueño empeore.
Una vez conocidas las consecuencias, si has optado por no parar, los entrenadores de la cadena de centros deportivos te dan sus mejores consejos para mantener la forma.
Lo ideal es hacerlo por la mañana, para tener el resto del día liberado. No hace falta que se entrene todos los días, eso sí, de hacerlo, siempre con ropa deportiva adecuada y, si quieres, recurriendo a rutinas cortas pero eficaces, tipo HIIT”.
Si, como decimos, te propones entrenar en vacaciones, las posibilidades aumentan si te adhieres a uno de estos tres planes:
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